Segundo capítulo seguido centrado en la persona del Gobernador (David Morrissey) y con el capítulo aburrido de la semana pasada, era lógico temer un capítulo en la misma línea que el de la semana pesada. Pero así no ha sido, esta semana tuvimos derecho al Gobernador que todos conocemos y odiábamos (por hacer el rol del villano de la serie) en la tercera temporada. Como vimos al final del último capítulo, después de matar a unos walkers con sus manos – mostrando de paso que nos perdimos 40 minutos al mostrar que ese cambio de personalidad era tan sólo pasajero – ha sido rescatado por su antiguo amigo Martinez y su nuevo grupo. Por lo tanto, vimos como Bryan (el Gobernador) y su nueva familia se integran a ese nuevo grupo y como intenta apoderarse de nuevo de su título de Gobernador. Sabiendo que el capítulo de la semana que viene es el mid-season finale (último capítulo de la media temporada) con el desenlace entre el Gobernador vs Rick, este capítulo se encargó de rellenar el hueco entre el capítulo en que vimos al Gobernador vigilando la cárcel y el de esta semana.
No lo quiero hacer pero lo hago igual
Aunque buena parte del capítulo parecía ser otra vez de relleno para que durase 40 minutos, en realidad el capítulo se centraba en como tenía que hacer el Gobernador para volver a ser el que era en Woodburry, un dictador loco. Con la única diferencia de que ésta vez tiene una nueva familia (en vida). El capítulo empezó con Megan y su nuevo padre jugando una partida de ajedrez, con flashbacks sobre lo ocurrido al final del último capítulo, y haciendo otra vez metáforas entre el ajedrez y la vida. Aunque Martinez estaba en contra de rescatar a su antiguo compañero, el hecho de que ese estuviese con una niña le hizo replantearse su idea y le permitió integrar su campamento con la condición de que él y su familia ayudasen a las tareas del campamento y que Martinez era el jefe del grupo. Para ello, el Gobernador tuvo que ayudar a Martinez, Pete (Enver Gjokaj) y Mitch (interpretado por el genial Kirk Acevedo, visto en Fringe) en busca de comida. Primero se encontraron con una cabaña dónde estaban 2 personas descabezadas con una pancarta de mentiroso y violador. Mientras que dentro unos walkers sorprendió al grupo pero eran pan comido para un Gobernador que estaba volviendo a su verdadero si mismo («hielo en las venas» dixit Martinez). Ahí, acompañados de unas cervezas, descubrimos que Mitch y Pete eran militares antes de que los muertos tuviesen una segunda vida.
I’m back
De vuelta al campamento, toda la familia (con la nueva «amiga» de Tara) y Martinez disfrutaron de una buena comida acompañada de mucho alcohol. Después de ello, ese último invita a su amigo a una partida de golf en el techo de una caravana como en los viejos tiempos. Ahí es dónde empieza la reconquista del Gobernador y sale a la luz su verdadera personalidad: un manipulador, loco y hambriento de poder. Golpea a Martinez en la cabeza y lo da en bandeja a los walkers presentes en uno de los pozos. Su plan de eliminar a cualquiera que se metiese en su camino acababa de empezar, aunque tuvo un momento de duda después de haber ido por el bosque con Pete y Mitch en busca de comida y ver como otro campamento fue saqueado por otras personas (después de haber perdido la ocasión de hacer lo mismo pero sin matar a nadie) y cazando tan sólo dos ardillas (no todo el mundo es Daryl). Esa misma noche intentó huir con su familia y la nueva novia de Tara pero en su camino hacia la salida se encontró con un grupo de walkers atrapados en barro y al final cambió su mente. Aunque la verdad, cuesta comprender el sentido de esta escena ya que no añade nada a la historia del Gobernador tan sólo agrega dudas, la principal siendo por qué quiso irse una vez que empezó a recuperar el poder?
Por lo tanto, prosiguió su plan y a la mañana fue a ver a Pete y lo mató a sangre fría, seguramente por haber rechazado de robar al grupo de humanos que había en el bosque. Tan sólo le faltaba hacer una visita a Mitch, pero en vez de matarlo a él también, prefirió dejarlo en vida siempre y cuando ese aceptaba sus órdenes, por lo tanto vivirá por lo menos un capítulo más. Obteniendo así lo que quiso desde el principio: el poder y soldados para vengarse de Michonne y Rick. El resto de capítulo sirvió para demostrar que había vuelto a ser la misma persona que en la tercera temporada, es bastante llamativo la escena en el lago con Pete bajo el agua y también el cambio de la relación con Lilly siendo distante con ella. Pero todo eso no era suficiente como para motivar a las personas del campamento para irse de guerra contra Rick y su cárcel, por ello fue necesario que Meghan fuese atacada por un walker y que Bryan la salvase en el último instante matándolo como si nada. El final reanudaba con el quinto capítulo de la temporada con un Gobernador espiando sobre la cárcel, y que estuvo a punto de matar a Michonne para poder vengarse de lo que le había hecho a su hija pero prefirió dejarla en vida porque vio que con su nuevo grupo y su tanque podía matarlos a todos, y no tan solo Michonne.Y al ver el avance al final del capítulo, todo indica que va haber muertos y no solo de gente que nunca hemos visto pero sino de personajes principales. Si el Gobernador domina la lista de potenciales en morir (cabe recordar que ya firmó para aparecer en otra serie), no se pueden descartar que uno(s) del grupo de Rick pueda morir también. Y al ver la cara de Glenn en el avance, todo apunta a que Maggie es una de ellos. Todo apunta a que el último capítulo del año (la serie vuelve en febrero) será de los mejores de la temporada, a menos que rellenen demasiado el capítulo como el sexto que estaba dedicado al Gobernador y su encuentro con su nueva familia. Eso sí, rodarán cabezas (y quizás literalmente) y puede que haya sorpresas de la que uno no se esperaba: ¿aparecerá Carol? ¿morirán o Rick o Michonne o Daryl? Esperemos que el lunes que viene recibamos todas las respuestas a esas preguntas y no quedemos con dudas y que la cárcel dé paso a un nuevo lugar.