Este año paso de meter 5 a 10 series para así poder hablar un poco más en general de series que hayan podido pasar desapercibidas y sobre todo porque no me dio mucho tiempo para dedicarles una «review». Cosa que intentaré arreglar este año, buscando una fórmula nueva y hacer algo mensual sobre series que me gustan mucho (da igual cuántas temporadas tienen). Y mirando hacia atrás el año 2015, ha sido un año bastante cargado en series. Si debería resumir en una sola palabra mis impresiones sobre las novedades que se estrenaron a lo largo de 2015, sería: Netflix. Por una parte tenemos la llegada de la plataforma de streaming en España, y por otra la calidad de sus series que logran estar a la altura de lo que nos ofrece HBO (Game of Thrones, Sopranos, …). De mis 10 series del año, 3 son de Netflix y están entre las 5 mejores, una que no está en mi Top 10 me dejó con un sabor amargo: Sense8. Y me sorprendió, en bien, la serie Master of None de Aziz Ansari. También me quedé sin poder ver muchas de las novedades prometedoras y que han recibido buenas críticas como lo son Into the Badlands (de AMC), unREAL (Lifetime) que vi el primer capítulo y me parece prometedor, The Man in the High Castle (Amazon), The Last Kingdom (BBC) el Juego de Tronos de la cadena británica, Show Me a Hero (HBO) o Deutschland 83, una serie alemana que ha recibido buenas críticas. Habrá que encontrar algún hueco para poder ver estas series en 2016, que nos promete algunas series interesantes de las que trataré en otra entrada. Antes de atacar en mis 10 series del año, os dejo un pequeño (excepto Sense8) resumen de series que vi y que para mi no merecían estar entre las mejores pero que quizás merecen la pena ser vistas. También os pongo las series que pensaba ver en las novedades para 2015-2016 y que no pude hacer unas primeras impresiones.
Las otras series de 2015
- Master of None: ¿comedia? creada por Aziz Ansari para Netflix. Es una serie buena, sin más a mi gusto. No es que me haya reído mucho, más bien casi nada, pero lo que me gustó de esa serie es que aborda temáticas bastante actuales como nunca se había visto. Me parece casi una serie más de carácter intelectual que una comedia que te hace reír. Os es que no me gusta el humor de Aziz Ansari.
- Sense8: la serie de los hermanos Wachowski tiene el aspecto de una superproducción del séptimo arte pero adaptado a la pequeña pantalla. Netflix intentó vendernos la serie muy por encima de lo que es realmente y quizás es dónde fracasó. La idea de la serie me gustó mucho, 8 personas en 8 lugares del mundo que están conectados entre sí. Para mi hay 3 aspectos que hacen que la serie me decepcionó más de la cuenta: primero, el uso del inglés para todos los protagonistas cuando se intenta vender la serie como algo internacional. Sobre todo viendo meses después un tal Narcos usar el español sin problemas, me hubiese gustado una inmersión similar con el uso del coreano, español, alemán y demás idiomas. Creo que hubiese mejorado mucho la inmersión en la serie y hubiese permitido mostrar aún más las diferencias culturales de cada región. Segundo, no todos los protagonistas son iguales de interesantes o tienen el mismo peso en la serie. La apuesta es demasiado arriesgada como para darnos tantos protagonistas para al final tener a algunos medio apartados. Me encanta a Capheus (aka Van Damme) pero me parece que no está lo suficientemente bien integrado en la serie, al igual que la coreana, el alemán o el mexicano que parecen casi inútiles. Salvo momentos puntuales, como la ayuda de Sun Back a Capheus cuándo este tiene que pelearse. Por último, la historia me parece que ha sido torpemente desarrollada. Teníamos en el segundo (o tercero?) capítulo una trama muy interesante con el personaje de Nomi en el que tenemos quizás una de las pocas series que ha sido capaz de tratar sobre el movimiento LGBT, en el que se nota sin duda la aportación personal de Lana Wachowski (que cambió de sexo poco después de las películas Matrix) y que casi acaba en papel mojado. Es una lástima que no se haya desarrollado mucho más ese aspecto por ejemplo, pero la trama principal tampoco es que brille mucho más. Los últimos capítulos parecen centrarse principalmente en Riley, Will y Nomi en una especie de búsqueda/rescate de la primera. El desarrollo de la historia es bastante confusa, y supongo que no se quiso desvelar todo en la primera temporada, me deja con una sensación de inacabado. Como si la primera temporada sirve más de lo que puede ser la serie más en adelante, pensando ya de antemano que la serie iba a ser renovada. Más allá de todo esto, la serie nos deleita con momentos muy interesantes, casi todos de parte de Capheus. Lo qué aún no tengo decidido, es si darle una oportunidad a la segunda temporada, si es que la hay, o si dejar la serie.
- Quantico: Me había gustado mucho el piloto, pero parece que a cada capítulo damos un giro de 180° y cambiamos de culpable como cambiamos de calcetines cada día. De momento sigo viendo la serie, ya que tiene aspectos interesantes, con un elenco variado y bueno.
- Life in Pieces: A primera vista parece la respuesta de CBS a Modern Family pero no es tan similar como lo puede parecer. Es una buena comedia que merece la pena ser vista.
- Fear the Walking Dead: spin-off de The Walking Dead que tiene cosas buenas y otras no tantas. El último capítulo tiene la llave de que la serie sea un éxito, y espero que la segunda temporada siga las líneas narrativas de ese capítulo. Poco más que decir de una serie de la que se esperaba mucho, demasiado quizás, y que no ha sido capaz de estar a la altura de su hermana. Una buena primera temporada pero con muchas mejoras que hacer.
- Dr. Ken: Solo aguanté dos capítulos, y eso que estaba deseoso de ver a Ken Jeong después de Community pero el humor de un niño de 12 años no permite aguantar mucho más.
- Supergirl: Miré 3 o 4 capítulos y no me enganché a la serie. Puede que al final sí me haya saturado de series sobre superhéroes y Supergirl es quizás la que sobró. Y eso que me alegraba que por fin teníamos a una mujer en el papel de superhéroe, pero no logró convencerme de seguir mirando. Puede que intenta darle una segunda temporada más en adelante, pero de momento dejo la serie aparcada.
- Scream Queens: no me parece mala serie pero tampoco es una serie que valga la pena ver. Sirve como un homenaje a las películas de terror de los 90 pero el aspecto derisorio me parece demasiado pesado como para seguir viendo la última serie de Ryan Murphy (American Horror Story, Glee).
- The Grinder: Una buena comedia divertida y algo estúpida, con un Rob Lowe impecable.
- The Player, Minority Report, Wicked City: todas canceladas y no valen la pena gastar tiempo en ellas.
- Agent Carter: Buena serie de Marvel, muy corta (8 capítulos) con una soberbia Hayley Atwell que retoma el rol de Peggy Carter. La serie es sobre todo para los fans de Marvel.
Las mejores novedades del año 2015
10) Fresh Off the boat (ABC)
Técnicamente la serie se estrenó en 2015, a pesar de que ya está en su segunda temporada. La serie tenía que estrenarse en septiembre/octubre de 2014 pero no fue así y su temporada se quedó en 13 capítulos. Las cosas no empezaban bien pero su humor y sobre todo la prestación de Constance Wu en la piel de la madre han hecho de esta comedia una de las mejores series del año, y para mí, la mejor comedia del 2015. La serie está basada en la autobiografía del cocinero Eddie Huang y nos muestra como un joven asiático, fan de Hip-Hop (elemeto clave de la serie), y su familia se mudan a Orlando para montar su propio negocio en la restauración. Si el protagonista principal es Eddie, la verdadera estrella de la serie es sin duda Jessica, la madre. Es quizás uno de los mejores personajes que hubo este año. Los hermanos pequeños de Eddie también me hicieron reír y permiten tener un lote de protagonistas bastante variados. Para muchos les parecerá otra serie más que sigue a una familia, pero me parece mucho más entretenido que Modern Family que se estancó hace ya demasiado tiempo.
9) iZombie (The CW)
Serie adaptada de un cómics y con la temática de los zombis, otra más muchos dirán. Antes de que dejen de leer, no, la serie no se parece en nada a The Walking Dead. Es casi todo lo opuesto. Aquí, tenemos a una protagonista principal, Liv Moore, que ha sido transformada en zombi aunque sigue teniendo aspecto humano (aunque un poco más blanca) y es capaz de hablar. Dónde se destaca la serie es en el hecho de que la zombificación de la protagonista, y su necesidad de alimentarse de cerebros es que cada vez que come un cerebro, su comportamiento es similar al de la persona que come el cerebro. Además de heredar de las últimas visiones de dicha persona, como si fuese una psíquica (cosa por la que se hace pasar para ayudar a la policía). La serie tiene un buen casting, además de un «villano» bastante interesante, interpretado por David Anders (Heroes, Once Upon a Time) que es el culpable de la transformación de Liv en zombi. Detrás de la serie está un nombre bastante conocido que es Rob Thomas, el creador de la excelente serie Veronica Mars. Poco a poco, la cadena The CW está proponiendo series de buena calidad que merecen la pena ver, aunque está claro que estamos a años luz de las superproducciones de HBO o Netflix, pero son capaces de entretener al público joven.
8) Ash vs Evil Dead (Starz)
Los que conocen las películas Evil Dead de Sam Raimi y con Bruce Campbell, ya saben lo que les espera en esta serie. Los eventos se sitúan unos 30 años después de las películas y seguimos a un viejo Ash que ya no parece muy capacitado para luchar contra demonios. Lo bueno de la serie es que uno puede desconectar el cerebro y disfrutar de un baño de sangre exagerado y humor sin sentido ninguno. Aquí lo que prima es el aspecto gore y el humor que ya había en las películas.Ya no hace falta introducir a Bruce Campbell y se nota que, a pesar de sus años, sigue siendo un increíble actor. Ash vs Evil Dead es una serie muy absurda que recoge fórmulas de películas de horror de los años 80 y que sabe perfectamente que no se lo está tomando en serio. Es de las pocas capaces de dar un contenido para adultos sin necesidad de buscar el realismo, ni dejarnos impresionados con unos CGI de última generación.
Blindspot es una de las 3 novedades de septiembre que más me han gustado. Jaimie Alexander, que interpreta a Jane Doe, merecía tener su propia serie y no decepcionó. Para los que aún no han leído mis primeras impresiones del piloto de la serie, pueden pinchar sobre el nombre de la serie más arriba. Nueve capítulos más tarde la serie me sigue gustando, aunque ya se está notando el peso del aspecto policial (un capítulo, un sospechoso). Pero la historia que gira alrededor de la protagonista, pero también del resto de personajes, me está gustando mucho. La serie no gira únicamente alrededor de Jane Doe, y el buen ejemplo sería el desarrollo de los personajes de Patterson (la científica) y de Zapata por ejemplo. Por lo tanto, estamos ante una buena serie policial, con bastante acción pero también con una trama lo suficientemente entretenida para seguir viendo el resto de capítulos, más allá del piloto.
6) Better Call Saul (AMC)
Una de la series que más esperaba este año es sin duda Better Call Saul. Un spin-off de Breaking Bad, mi serie favorita de todos los tiempos. Enfocada sobre el abogado Saul Goodman, aunque antes de cambiar de nombre, la serie se sitúa unos años antes de lo ocurrido en Breaking Bad. Y tenemos a un Jimmy McGill que está a las antípodas de Saul, y que es un abogado bastante mediocre. Ya me imaginaba que la serie no se iba a parecer en nada a lo que tuvimos con Breaking Bad y la verdad es que no me molestó en absoluto. Me alegro que Vince Gilligan (creador de ambas series) haya tomado una ruta distinta, permitiendo a la serie tener su propio espíritu, y no ser únicamente un simple spin-off. La serie tarda un poco en arrancar, pero una vez el motor en marcha, cuesta mucho descolgarse de la historia. Bob Ondekirk demuestra ser un muy buen actor, al igual que el resto del reparto de la serie con la casi totalidad de caras nuevas. La primera temporada ha sido capaz de sentar una buenas bases que permitirán ir más rápido ahora, y ya tenemos pinceladas de la transformación de Jimmy en Saul. Una buena serie, que quizás es comparada erróneamente con Breaking Bad y le puede pesar a la hora de tener libertad creativa.
Basado en la película del mismo nombre, no me esperaba gran cosa de la serie y resulta que ha sido la mayor sorpresa en cuánto a novedades de la temporada (septiembre/octubre). Si después de mirar la mayoría de pilotos de mi lista ocuparía quizás la tercera posición, detrás de Quantico y Blindspot. Pues a lo largo de las semanas, la sorpresa se ha ido transformando en un flechazo. Me encanta la serie. Si no está más alto en mi top, es únicamente porque las que están por delante son producciones de otra categoría. Al igual que Ash vs Evil Dead, la serie no se toma las cosas demasiado en serio. Tira más por el aspecto humorístico y casi de serie parodia. Su protagonista principal, interpretado por Jake McDorman, es la clave de que me haya encantado tanto la serie, con los guionistas que me gustarían saber qué fuman. Al principio todo apuntaba a una serie policial como cualquier otra pero, no me acuerdo en qué capítulo, nos encontramos con algo que es casi imposible de describir. Sigue siendo una serie policial, pero toma un camino tan extraño, y un buen ejemplo sería quizás el hommage que hacen a la película Ferris Bueller’s Day Off muestra la capacidad que tiene la serie de destacarse del resto. La serie tiene un je ne sais quoi que hace que te enganches sin darte cuenta y te entretiene en cada capítulo con una presentación tan atípica que casi parece increíble que pueda existir una serie así. También tiene sus momentos más serios e incluso en ese apartado no defrauda, aunque es verdad que uno se enganchará por las historias que nos cuenta Brian Finch, el protagonista. Tampoco podría dejar de mencionar la dirección visual que ya me había gustado en la película como en el primer capítulo. Y no podría no mencionar al dúo de Mike e Ike, los «guardaespaldas» de Finch. Limitless es una serie imprescindible de ver y que tiene un aspecto muy refrescante, capaz de destacarse de la multitud de series que se estrenan cada año, tanto en canales en abierto como en los de cable. El vídeo que os pongo a continuación es un buen ejemplo de lo diferente y «especial» que es la serie.
4) Jessica Jones (Netflix)
Después de haber visto a Daredevil, solo deseaba una cosa, que se estrenara Jessica Jones en 2015. Me encantó tanto la primera producción, fruto de la cooperación entre Marvel y Netflix, que estaba ansioso de ver qué nos esperaba para el resto de series. También deseaba encontrarme con una serie que fuese diferente a Daredevil, porque quizás al contrario de mucha gente, no quería otra copia del demonio de Hell’s Kitchen y así fue. Jessica Jones no es el típico héroe que conocemos, empezando por el hecho de que ella misma no se considera como tal. Es una mujer grosera, que le gusta beber más de la cuenta y con un gran apetito sexual. Casi parece increíble creer que Marvel haya sido capaz de adaptar ese cómics en serie. Pero lo bueno con las series Netflix es que no se parecen en absolutamente nada a las películas. Tanto Jessica Jones como Daredevil tiene un aspecto mucho más oscuro, y con un humor menos marcado. No es que Jessica no es graciosa, sino más bien son las situaciones que hacen reír a uno. La protagonista acumula todos los imperfectos para que sea odiada, aunque al final lo que realmente sobresale es pena. Y eso se debe totalmente a Killgrave, interpretado por un genial David Tennant (aka Tenth Doctor), el malo de la primera temporada. Es verdad que Daredevil dejó el listón tan alto que parecía imposible hacer las cosas mejor, sobre todo en el apartado del villano. Pues Jessica Jones nos deleitó de quizás uno de los mejores villanos de los últimos años. Tampoco quiero desvelar demasiado de la serie, pero el personaje de Killgrave es tan pervertido y tan retorcido que casi da la impresión de que lo único de humano que tiene es su aspecto.
En cuanto a la serie en sí, que toma más un aspecto de serie detective noir de los años 50, como se pudo ver en muchas series que hacen capítulos especiales del estilo. Con una música bastante sobria, que apenas destaca pero que deja un ambiente muy jazz y casi relajado, cuando la serie es todo menos relajada. Puede que el único aspecto negativo de la serie es que no hay tanta acción como en Daredevil, o por lo menos tan memorable (esa escena del pasillo). Pero el verdadero corazón de la serie es su historia, un guion casi irreprochable, que nos muestra el caos y la destrucción que deja tras sí Killgrave y cuánto afectó a la propia Jessica y lo atormentada que está. Jessica Jones no es esa serie típica de superhéroes que están acaparando las pantallas de televisión, y nos da la sensación de que en el fondo, y a pesar de ser superdotada, no es tan diferente del común de los mortales y también tiene desperfectos (y muchos). Además es capaz de enganchar a gente que quizás no le interesa mucho, o nada, el universo de los superhéroes, porque ese no es el enfoque de la primera temporada.
3) Narcos (Netflix)
Tenía muchísimas expectativas para esta serie que se centraba en la vida de Pablo Escobar y la verdad es que no me defraudó ni un ápice. Decir que me encantó, es casi un eufemismo. Netflix y José Padilha (Tropa de Elite) nos han dado una serie tremenda y que es quizás la mejor adaptación de la vida de Pablo Escobar. Añadiendo la actuación impresionante de Wagner Moura en la piel del traficante colombiano. Lo que ha hecho es bastante loable, ya que el actor, de nacionalidad brasileña, aprendió el español para la serie. Porque sí, una de las cosas que más me gustaron de Narcos es que la serie usa los idiomas originales de los protagonistas. Y es verdad que la mayoría de acentos de los actores no son de Colombia, pero aún así, se agradece el esfuerzo tomado y la osadía de hacer una serie americana en español. Cosa que no es el caso de Sense8 por ejemplo, que usa tan solo en algunos momentos el idioma original del protagonista. Narcos me encantó de principio a final, tanto por la actuación, como por la realización, por los lugares o por el guion. Todo funciona de maravilla, y aunque la serie en sí es una ficción, casi cuesta darse cuenta que lo que nos cuenta está basada en hechos reales. El lema de la serie «plata o plomo» describe a la perfección el ambiente de la serie y la locura de Pablo Escobar que fue sin duda el narcotraficante más importante de Colombia (y del mundo?) pero también un sanguinario asesino al que no le temblaba la mano a la hora de matar a cualquiera (incluido políticos o militares). No es por nada que se lleva la medalla de bronce como novedad del año 2015.
2) Daredevil (Netflix)
Tercera serie Netflix en el top y vaya serie. ¿Qué más se puede decir sobre Daredevil que no se haya dicho? Cualquiera que vea esa escena de pelea del pasillo (el vídeo abajo) se enamorará enseguida de la serie. Casi me parece mejor que la de Old Boy (la versión coreana, no la adaptación americana). Lo bueno de un superhéroe que tiene un poder que no esté reflejado en la capacidad física (es decir de pelea), pues nos permite tener escenas de pelea como nunca hemos podido ver en televisión. Cada golpe que recibe Matt Murdock los podemos sentir como si fuésemos nosotros quienes recibíamos esos golpes. Para mí ese es uno de los mejores aspectos de la serie, acompañado por una realización impecable para darnos unas peleas entretenidas y realistas. Tampoco puedo pasar por alto la prestación de Vincent D’Onofrio en la piel del villano Wilson Fisk. Casi parece increíble que dónde mejor ha brillado Marvel, ha sido en sus series producidas por Netflix. No es que no me gustan sus películas, todo lo contrario, pero el hecho de tener algo mucho más serio y con una tonalidad más oscura da un viento de frescor al Marvel Cinematic Universe. La segunda temporada ya está de camino y promete ser igual de buena que la primera con la introducción de Punisher, interpretado por Jon Bernthal (Shane en The Walking Dead), y Elektra. Daredevil es sin duda una de las mejores series que tiene ahora mismo Netflix, y demuestra que el operador de vídeos en streaming es capaz de crear contenido propio a la altura, e incluso mejor, que muchos de los canales estadounidenses
1) Mr. Robot (USA)
¿Por dónde empezar? Creo que hacía mucho tiempo que no veía una serie tan buena como Mr. Robot, y que quizás su primera temporada puede estar a la altura de las de True Detective y Fargo del año anterior. La trama de la serie, que sigue a un programador/hacker con serios trastornos y problemas sociales. La prestación de Rami Malek, en la piel del joven hacker Elliot, es tremenda y me dejó casi boquiabierto. Sigo sin comprender como han sido capaz de hacer una serie que tiene como temática principal la informática, y más precisamente el universo del hack, y que no sea nada aburrida. Hasta el nombre de los capítulos tienen que ver con la informática, ya que cada uno acaba con la extensión de un formato vídeo (.mp4, .avi, .mkv, …). Tanta dedicación hasta el último detalle es impresionante. Silicon Valley también tiene como temática central la informáticoa pero juego en otro registro, el de la comedia. En este caso estamos ante un drama con una trama tan increíble y con un desenlace de eventos que dejarán atónitos a más de uno. El protagonista nos hace recordar a un personaje de una película (que es una obra maestra) de los años 90, y si me abstengo de decir el nombre de dicha película podría resultar en una especie de spoiler para Mr. Robot. Cabe destacar la presencia de Christian Slater, en la piel de Mr. Robot, y sobre todo de Martin Wallström en la piel de Tyrell Wellick que tiene una interpretación igual de impecable que el propio Rami Malek.
La trama, sin querer contar demasiado, sigue al propio Elliot que es reclutado por el anarquista Mr. Robot para intentar hackear una de las mayores empresas del mundo, llamada irónicamente y a propósito Evil Corp, para intentar suprimir la deuda de millones de personas. Elliot trabaja en una empresa que se encarga de proteger los datos de Evil Corp, y tiene una posición muy aventajada por lo tanto para «infiltrarse» en las bases de datos de la empresa. En tan solo 10 capítulos, Mr. Robot es capaz de alzarse en lo alto del podio de novedades de 2015, pero incluso como una de las mejores novedades que hemos tenido esta década. Pensaba que iba tener que esperar mucho tiempo antes de encontrar una serie que esté igual de buena que Breaking Bad, y puede que la haya encontrado. De momento, la primera temporada me ha encantado, y aunque el último capítulo tiene ciertos desperfectos que no dejará contentos a algunos, a mi me pareció bien calculado, sobre todo para dejar material del que hablar en la segunda temporada.